LA RESTAURACIÓN DE LA VIRGEN DE LA CONCEPCIÓN DEL SILENCIO.
Hace tan sólo unos días, pudimos volver a contemplar y deleitarnos con la belleza del rostro de la Virgen de la Concepción, Titular de la hermandad del Silencio.
El encargado de esta conservación-restauración ha sido Gutiérrez Carrasquilla quien se ha centrado en la consolidación de la policromía y en una pequeña limpieza general de la suciedad en la superficie, todo ello en un brevísimo período de tiempo.
La imagen que tallara Sebastián Santos hace poco más de 50 años, aparecía ante sus devotos muy diferente a como estábamos acostumbrados a verla. El rostro aparece ahora mucho más claro, más limpio. Se ha perdido el aspecto mortecino y algo oscuro de la imagen debido a la suciedad y al humo acumulado durante años. No obstante, el resultado final de esta limpieza está provocando diversidad de opiniones, y no ha gustado a todos. Incluso hay algunos que confiesan sentir añoranza por esa oscuridad a la que estaban acostumbrados.
Hemos traído a este Blog dos fotografías de la Virgen, una del antes y otra del después de la intervención de Carrasquilla. Ustedes opinarán, si es que no lo han hecho ya. Lo cierto es que la Imagen es de una belleza exquisita que, seguro, con el paso del tiempo volverá a coger la tonalidad que ahora se echa de menos.
Hace apenas tres años, en 2006, ocurría un caso similar con la Virgen de las Mercedes de la Hermandad de Santa Genoveva. Gracias a una restauración tras 51 años de su llegada al barrio del Tiro de Línea, muchos, dentro de una gran expectación ante su regreso, se sorprendieron, primero por la sencilla forma con que se presentó, tan sólo con un encaje blanco sobre su cabeza dejando ver su cabellera. Sin rosarios, sin joyas y vestida con una saya blanca bordada y un manto de color celeste. Pero en segundo lugar por esa limpieza que había dejado atrás el color moreno de su tez.