Año
de la fe 2, Sevilla 0
Veo con alegría y con cierta envidia
sana como en todas y cada una de las capitales de provincia andaluzas se
suceden Procesiones Magnas, Vía+Crucis Extraordinarios, Magnas Marianas, etc, con el beneplácito, apoyo y unanimidad de las
hermandades y devotos de cada provincia o ciudad. Y me sorprende, por decir
algo, que en Sevilla, donde se presume de tanto marianismo y de tanto espíritu
cofrade hasta sudarlo a chorros, no hayamos sido capaces de organizar un acto
de medio pelo en condiciones para conmemorar lo que toda Andalucía ha hecho muy
bien o se encuentra en ello.
Se pensó en dos acontecimientos tales
como el famoso, comentado, criticado, en definitiva, aludido Vía+Crucis
Extraordinario con 14 pasos, que antes eran andas; y en la que resultó indiferente procesión de Nuestra
Señora de los Reyes que pasó de un 27 de Abril a un 11 de Mayo y luego al
oscurantismo.
En el primer caso se puso de manifiesto
que muy pocos creían en el famoso Vía+Crucis que no llegó a celebrarse como fue
pensado. Estoy convencido de que muchos (autoridades civiles, cuerpos de
seguridad, Consejo, incluso algunas de las mismas hermandades seleccionadas)
suspiraron de alegría, de satisfacción y de tranquilidad al conocer el primer
NO a la celebración de este hecho. Nadie daba un duro por la celebración de
este Vía+Crucis que planteaba dudas a todos por todo. Francamente, uno pensaba
en la que se podía haber liado en los
alrededores de la avenida de la Constitución y daba temblores y traspiraciones
frías.
Pero igual de zafias resultaron la
preparación y difusión de la Procesión de la Patrona de Sevilla que quiso ser
justificada como de calidad, que no de
cantidad. Desde luego, el que no se consuela es porque no quiere.
Visto lo visto, cada vez estoy
más en la idea de que los sevillanos son el mejor ejemplo del tipo español al
que se refirió Gerald Brenan en 1943 cuando decía que “los españoles estamos atomizados en grupos tribales y
somos incapaces de concebir lo colectivo.” Póngase sevillano donde el Sr. Brenan dijo español.
Algo que
cada vez tengo más claro es la sensación, intuición o, ponga la palabra que
usted considere necesario, de que el sevillano se considera el centro de
gravedad de todo el universo y este hecho se hace extensivo a cualquier
organismo o asociación, por supuesto hermandad, que esté formada en esta ciudad
nuestra.
En
aquel desdichado Vía+Crucis todos los pasos parecían ser iguales y este hecho ¿se
va a consentir en Sevilla? Recordemos la que se lió con Torreblanca cuando
asomó el paso a la puerta de la Iglesia, tema este que merece otro comentario aparte. La osadía de este Barrio fue
vilipendiada por los autodenominados “rancios”. Si hubiera sido otra hermandad,
ya se habrían buscado excusas y explicaciones loables que la justificaran
pero…….
Y en
el caso de la desgraciada procesión de la Virgen de los Reyes, la gente
claramente optó por las comuniones, diversas procesiones de la provincia, la
playa, y, amigo mío, por La procesión de la Virgen del Rocío en Almonte donde ahí, con menos peregrinos, no faltó
nadie. Y luego que hablen y digan.