Amalia Rosado Salas.MONICIÓN DE ENTRADA
1º ANIVERSARIO 18 DE OCTUBRE
De los 450 años de historia documentada de tu existencia como Reina Soberana del Amor, Reina de la Paz y Reina del Corazón de todos tus hijos Soleanos, Virgen Bendita María Santísima de la Soledad, Venimos hoy a rememorar y recordar con alegría y con gozo el 18 de Octubre.
Día por siempre señalado en el calendario de nuestros corazones y que quienes tuvimos la dicha de vivir, tanto propios como foráneos, no podremos olvidar nunca pues, todo lo acontecido será difícilmente repetible e inigualable en la devoción mariana de nuestro pueblo de Huevar.
Día por siempre señalado en el calendario de nuestros corazones y que quienes tuvimos la dicha de vivir, tanto propios como foráneos, no podremos olvidar nunca pues, todo lo acontecido será difícilmente repetible e inigualable en la devoción mariana de nuestro pueblo de Huevar.
Dieron aproximadamente las dos y media de la madrugada. Noche cerrada de otoño.
Griteríos, palmas, cánticos, oraciones… Todas ellas manifestaciones del más puro nerviosismo que afloraba por todos y cada uno de los allí presentes: niños, jóvenes, ancianos…
Nadie quería perderse aquel maravilloso momento.
La expectación cortaba la respiración, cuando de pronto sonaron las campanas….
Por fin, se abrieron las puertas de tu Casa Hermandad. Era el preludio de que tu regreso era real y presente.
Todo el dolor y la angustia por tu ausencia de aquellos interminables y polémicos siete meses de espera, se convirtieron en júbilo y paz en un solo instante, cuando pudimos contemplar la única y verdadera realidad “ QUE TU EXTRAORDINARIA E INCOMPARABLE BELLEZA NO PUDO ELIMINARLA EL FUEGO”, y que tu mirada profunda y serena penetraba en todos los que allí la buscaban.
Tu pueblo se vistió de gala ese día, cientos de balcones y ventanas lucían tu bello rostro. Reflejo del anhelo por tu imagen bendita.
Numerosísimas mujeres vestidas elegantemente con la mantilla tan típica y característica de nuestra hermandad, abrían un cortejo señorial y digno de lo que tú eres para todos nosotros, NUESTRA MADRE BENDITA.
Autoridades gubernativas, eclesiásticas, y un sinfín de representaciones de otras Hermandades del Aljarafe Sevillano, quisieron con sus estandartes e insignias acompañarte en tu Salida Extraordinaria Conmemorativa de tu regreso.
Todos juntos fuimos testigos y partícipes, de una celebración eucarística sin precedentes, en un lugar emblemático de nuestro pueblo “LA PLAZA DE ESPAÑA”, bajo un altar efímero que reproducía con todo detalle el arco monumental de la Macarena de Sevilla y en el centro de ese marco incomparable estabas Tú, Virgen Bendita de la Soledad, como si del mismo cielo te hubiesen bajado tus hijos los costaleros, a los sones de una música celestial interpretada por las voces más bellas.
Los rayos del sol iluminaron tu cara y las primeras gotas de aquella época estival tampoco quisieron perderse tan maravilloso e idílico momento.
Madre Mía, Madre Nuestra, Madre de la Soledad, Gracias y Mil Gracias venimos hoy a darte porque como Madre Soberana que eres, has sabido recompensar a todos tus hijos, del sufrimiento de tiempos ya pasados, permitiendo que tu extraordinaria belleza sea admirada por siempre.
DIOS TE SALVE SIEMPRE VIRGEN MARÍA.
MARÍA SANTÍSIMA DE LA SOLEDAD.
