El pasado martes, día 20, celebró la cercana población de Sanlúcar la Mayor la festividad de su patron, San Eustaquio. Este año se ha caracterizado por la suspensión de la Romería que se había creado una década atrás. Por lo demás, como cada año, el patrón de Sanlúcar procesionó por sus calles.
Nació en Roma y militó en las banderas de los emperadores Vespasiano y Tito en su guerra contra los judíos, donde Eustaquio llegó a capitán. Tenía mujer e hijos, y, aunque gentil, era modesto y amigo de hacer bien. Cazando un día vió entre las astas de un ciervo un Crucifijo y oyó una voz que le dijo: «Eustaquio, ¿por qué me persigues?" Convertido con este milagro, Dios le probó como a Job quitándole su hacienda, por lo cual determinó buscar otro país. Tuvo el emperador Trajano necesidad de su valor para una guerra que se le ofreció; buscóle y, habiéndole hallado, le encomendó la empresa, con el cargo de capitán general. Consiguió la victoria, y en la vuelta encontró a su mujer y a sus hijos, y todos cuatro, por ser cristianos, fueron presos y puestos en un buey de metal hecho fuego, y en este martirio entregaron sus almas al Señor el día 20 de Septiembre año 130.